Con una cinta amarilla atada en la muñeca de su brazo derecho y otra en su guitarra, Feliú identificó su concierto con la batalla que se libra en Cuba y en muchas partes del mundo, por la liberación de Los Cinco Héroes antiterroristas condenados en prisiones de Estados Unidos.
“Llevo estas cintas amarillas como expresión de solidaridad con la causa de estos cinco luchadores cubanos, que mantendré en la muñeca de pulsar mi guitarra hasta que sean liberados y vuelvan de regreso a esta patria”, expresó el trovador.
Luego de su recital, Feliú escuchó poemas de la cosecha de Lina Leyva, destacada poeta del territorio moronense y escuchó interpretaciones del también trovador avileño Héctor Luís de Posada.
El patio de la Fundación Nicolás Guillén de Morón, sirve de escenario a variados proyectos, como la tertulia Estoy poniendo la hamaca y Las Barcas de Cristal, espacios que han recibido a figuras relevantes del mundo artístico, deportivo y cultural.
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