Siempre es bueno voltear la vista al pasado, es una forma de buscar respuestas para explicar o, al menos, entender el presente.
Hoy, movido por la abulia de una plomiza tarde, tomé en mis manos varios ejemplares de la centenaria revista Bohemia de la década de los años ´50 del pasado siglo.
Mucho me hizo reflexionar, una vez más, sobre aquellos ya lejanos tiempos que, por fortuna, el pueblo cubano ha dejado atrás hace más de cinco décadas, sobre todo los sectores que conformaban las amplias masas explotadas, las manipuladas por promesas electorales, las olvidadas por todos los “gobiernos” republicanos, los arrojados por la Guardia Rural a los caminos con sus magras pertenencias, sin compasión, sin pudor alguno aunque entre los que quedaban abandonados a su suerte hubieran ancianos, mujeres y niños.