En la mayoría de los hogares el menú es invariable: en primer lugar el lechón asado, congrís, yuca con mojo, y las ensaladas de la época, pero entre ellas la lechuga.
Claro que faltan algunos componentes de la festividad: la cerveza fría, el vino tinto o quizás el ron añejado, dulces y otras iniciativas familiares.
Pero mientras llega la hora de la cena, en los hogares cubanos, se canta, se baila, se cuentan anécdotas, todo lo cual garantiza un sano ambiente familiar.
A la Nochebuena se hacen invitaciones especiales a familiares o amistades.
La de este año ya se organiza. Este sábado en la ciudad se efectuó una feria gigante donde se ofertaron los principales componentes de la cena. La población acudió y se surtió de lo imprescindible; ajo, cebolla, carnes, hortalizas, verduras, arroz, frijoles y viandas.
Les aseguro que la fiesta de este año será en grande. La familia cubana tiene razones para festejar.
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