Por Héctor Izquierdo Acuña
Juan Carlos Espinosa Trujillo, aunque en la actualidad reside en La Habana, es natural de la ciudad de Morón, en la provincia de Ciego de Ávila, y hasta aquí llegó la noticia de su impacto por haber sido uno de los participantes en los ensayos, fase tres, de la vacuna Soberana II.
Cuenta que fueron seleccionados varios municipios habaneros para el ensayo, entre los que estuvo Mariano, donde reside desde hace varios años este destacado moronero, quien se siente orgullo como cubano por haber contribuido a la demostración de la eficacia de la vacuna, fruto de la labor de científicos para proteger la salud de la población.
"Es impresionante la preparación que ha tenido este proceso, la seriedad, la profesionalidad y el trato de todo el personal" apuntó Juan Carlos, tras recibir la dosis de vacunación de manera experimental.
Acotó que es digno de admirar cómo Cuba, un pequeño país, con limitaciones económicas, se encuentre enfrascado, con mucho avance en el proceso de la vacuna contra la Covid-19, muestra de la voluntad política del estado cubano por la salud de la población.
Confiado en el alto nivel del potencial científico cubano, me presenté en el Consultorio Médico para dar mi disposición de participar en el ensayo de la fase tres de esta vacuna.
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