Cuadrangular por el jardín izquierdo en la tercera entrada del joven Yasmani Tomás frente al abridor Kenji Otonari dio lo que sería la clave del partido. En la octava, vino el puntillazo de Alfredo Despaigne con enorme bambinazo de tres anotaciones.
«Cumplimos una actuación impecable y estamos muy satisfechos con las tres victorias en Fukuoka. Pienso que el equipo se acerca a su mejor rendimiento y puede cumplir las expectativas en la próxima etapa de Tokio», dijo el manager cubano Víctor Mesa.
Por su parte, el mentor contrincante, Koji Yamamoto, subrayó que el nivel de los bateadores de Cuba es impresionante y apreciar el trabajo de los lanzadores de la tierra del Sol Naciente, irregular en el cotejo, resultó interesante.
Los alegres y bulliciosos aficionados locales sufrían con la cadena de escones iniciada por el zurdo Wilber Pérez, seguida por Yander Guevara y excelentes tres capítulos de otro del brazo izquierdo, Norberto González, éste sin tolerar imparables.
Aunque los dos directores habían adelantado que tantearían el cotejo con ensayos y tal vez alguna “arma secreta” escondida, el encuentro fue muy disputado y no dio lugar al respiro.
Luego de estar controlada por completo la ofensiva cubana, el jardinero derecho Tomás silenció a más de 30 mil espectadores en el Fukuoka Yafuoku Dome, para abrir el marcador.
Fue la única libertad que toleró el zurdo Kenji Otonari antes de ceder el box al veloz derecho Masahiro Tanaka, a quien le hicieron la segunda por hit de José Miguel Fernández y doblete del cuarto bate Frederich Cepeda.
Pero Tanaka se recompuso y logró seis ponches en dos capítulos de actuación para frenar a los caribeños. Lo sustituyó en el sexto Hirokazu Sawamura, quien permitió la tercera de los ganadores por doblete de Fernández y sencillo de José Dariel Abreu.
El dominio de los cubanos fue casi absoluto hasta el noveno inning. Después de un out, los siguientes relevistas Raisel Iglesias y Darién Núñez dieron tres bases por bolas.
Ingresó el veloz derecho Vladimir García que aceptó sencillo de Chono (gran jugada del torpedero Arruebarruena impidió que siguiera a los jardines), fly de sacrificio de Toritoni y otro incogible de Ibata dieron las carreras de los asiáticos.
Los cuatro equipos clasificados para la segunda ronda en Asia se trasladarán a Tokio, donde desde el viernes disputarán por doble eliminación los dos boletos hacia San Francisco, Estados Unidos, sede de las semifinales y final del torneo del 17 al 19 de marzo.
Cuba chocará con Holanda, y Japón lo hará ante Taipei de China.
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