Páginas
▼
miércoles, 4 de diciembre de 2019
Despertar de vocaciones en escuela rural de Morón
En las afueras de la ciudad de Morón, en la central provincia de Ciego de Ávila, entre áreas cañeras, sembrados de cítricos y cultivos varios, se localiza la comunidad rural conocida como Los Quemados. Es un vecindario de viviendas típicas, confortables y uniformes y formando parte del módulo comunitario está la escuelita Heriberto Felipe Arnado.
Aunque ese asentamiento rural lo componen cerca de 50 viviendas, la escuelita tiene la característica de ser una de las de menor matrícula de todo el municipio, con apenas ocho niños que cursan quinto y sexto grados.
Madelín Roche Guzmán es la maestra, Yanet López Fernández la asistente educativa, mientras que del laboratorio de computación se encarga Rubisel Reyna Campos, un trio que integra una laboriosa y dedicada familia del sector de la educación.
De la escuela enseguida nos contaron historias, de cuando el huracán Irma desplomó parte de un frondoso árbol sobre el techo, de los esfuerzos por reparar las averías, de las ingeniosidades para acondicionar un área enyerbada para la educación fisica, y así otros impresionantes relatos, como la reciente restauración de la cerca perimetral y la pintura exterior del local.
Pero también el equipo de Comunicación conoció relatos de los estudiantes, interesados en conocer si las fotos de su escuela se verían en Facebook o en un periódico.
Samit Díaz Salas cursa el sexto grado, y su casa está algo alejada de la escuela, porque vive en la zona de La Yamagua, pero logra llegar puntual a clases luego de sufrir caídas por no dominar muy bien el equilibrio en su nueva bicicleta. Cuenta que quisiera se agrónomo, porque le encanta eso de sembrar y cultivar la tierra, como lo hace su familia.
Sin embargo, Ayemandi Bárbaro Pérez, también de sexto grado, disfruta cuando corresponde el turno a la Instructora de Arte llamada Lianet, pues sueña ser músico cuando sea grande.
Ya en la retirada nos intercede Melisa Navarro Alvarez, para decirnos que el 15 de diciembre cumplirá once años y quiere que la felicitemos. Al referirse a sus sueños cuando sea grande responde: "Me gustaría ser Aeromoza, y desde ahora me empeño en conquistar esa aspiración".
Concluye la jornada de clases en la escuela Heriberto Felipe y queda formalizada una invitación para las actividades que organizan por el Día del Educador. Allí también hay razones para celebrar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
(Su comentario puede tardar unos minutos para ser publicado)