Para ello se adelanta la implementación de medidas que incluyen nuevas formas de producción como el sector por cuenta propia y las cooperativas, entre otras medidas destinadas a construir un socialismo próspero y sustentable.
El líder histórico de la Revolución cubana Fidel Castro definía que "esta es la Revolución socialista y democrática de los humildes, con los humildes y para los humildes".
"Y por esta Revolución de los humildes, por los humildes y para los humildes, estamos dispuestos a dar la vida", sentenció el 16 de abril de 1961 ante una muchedumbre de cubanos enardecidos que acompañaban el sepelio de las víctimas del bombardeo mercenario ocurrido el día anterior.
El sábado 15 de abril, aviones enemigos camuflados con insignias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias bombardearon el aeropuerto de Ciudad Libertad (en la capital), la base aérea de San Antonio de los Baños, al sureste, y el aeródromo de la oriental ciudad de Santiago de Cuba.
Cuenta la historia que el pueblo se movilizó hacia la capitalina avenida 23 y 12, en las cercanías del cementerio de Colón. Desde los balcones colgaban las banderas cubanas y caían flores.
El cortejo fúnebre y la marcha de miles de persona se detuvieron en la, desde entonces, histórica esquina habanera de 23 y 13, donde Fidel Castro hizo uso de la palabra.
En alusión al gobierno de Washington el líder expresó: "Eso es lo que no pueden perdonarnos, que estemos ahí en sus narices y que hayamos hecho una Revolución socialista en las propias narices de Estados Unidos!".
De esa forma la Revolución cubana declaraba al mundo, y a Washington, su carácter socialista.
Acusó entonces a la administración estadounidense de entorpecer la marcha pacífica de la nación cubana, destruir los recursos económicos de su pueblo y las vidas de sus ciudadanos, y demandó que ese país asumiera la responsabilidad de la agresión.
Estos hechos nos van a enseñar, estos hechos dolorosos nos van a ilustrar y nos van a mostrar, quizás con más claridad que ningún otro de los ocurridos hasta hoy, lo que es el imperialismo, afirmó.
La imagen de los fusiles en alto en manos de hombres y mujeres inmortalizó el total respaldo al giro que tomaría en lo adelante el proceso revolucionario que continúa en la isla caribeña.
Fidel Castro en ese discurso avizoró además la agresión que se gestaba y que se produciría dos días más tarde por Playa Girón (Bahía de Cochinos).
En menos de 72 horas, las recién creadas Milicias Nacionales Revolucionarias, junto con fuerzas del Ejército Rebelde y de la Policia, vencieron a los invasores y protagonizaron así la primera derrota de Estados Unidos en América Latina.
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