-Un acontecimiento cultural llena de emociones a los moronenses: la Feria del Libro.
-En fotos algunas expresiones que dicen mucho
La XXIII edición de la Feria del Libro ha llegado a la norteña ciudad de Morón con aires renovadores. El recinto ferial ha permanecido reboso de personas convocadas por una programación que llama el interés no solo de niños y jóvenes, sino también de los adultos.
Si un elemento es de resaltar, es el empeño de la comisión literaria y artística que fue capaz de conformar una programación, no solo dinámica, sino equilibrada, bien balanceada y llena de buen gusto.
Si bien la Feria no cubrió, al parecer, las espectativas en cuanto a volúmenes de títulos y cantidad de ejemplares,por las limitaciones económicas que se interponen, la población pudo apreciar cuatro días de intenso quehacer cultural, donde manifestaciones teatrales, danzarias, musicales, expresiones literarias, extensiones a comunidades, tertulias y otras muchas iniciativas, resultaron del interés de la colectividad.
Aun el recinto ferial permanece abierto, donde se ha hecho realidad la magia de los libros consistente en abrir sus páginas para revelar sus secretos.
Es así que hemos visto caminar de un lado a otro, personajes famosos que conocimos un día a través de hermosas fábulas.
Por eso los rostros son de alegría y placer. Se ha cumplido bien el deber.
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